En el mes de Santa Ana y San Joaquín, meditemos en Efesios 6,1-3: "Hijos, obedeced a vuestros padres en el Señor, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa: para que te vaya bien y seas de larga vida en la tierra".
Sigamos el ejemplo de obediencia y amor filial que nos enseñan nuestros patronos, honrando y respetando a nuestros padres con gratitud y amor.
Página web desarrollada con el sistema de Ecclesiared