En el mes de Santa Ana y San Joaquín, reflexionamos sobre Génesis 1,28 donde Dios bendice a Adán y Eva y les dice: "Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla".
Esta bendición nos recuerda la importancia de la familia como fundamento de la sociedad. Sigamos el ejemplo de nuestros patronos, siendo responsables en nuestro papel como padres y abuelos, criando a las nuevas generaciones con amor, valores y fe en Dios.
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