El testimonio del Evangelio: firmeza, alegría y no violencia

Lunes 16 de junio de 2025
“El testimonio del Evangelio: firmeza, alegría y no violencia”

1. El Tiempo Ordinario: un camino extraordinario de conversión y misión

Con alegría iniciamos esta nueva semana del Tiempo Ordinario, que nos invita a recorrer con Jesús la vida cotidiana desde la esperanza y la fidelidad. No se trata de un tiempo menor en la liturgia, sino de un espacio privilegiado donde la gracia de Dios se derrama en los acontecimientos simples de cada día. Este lunes 16 de junio, en el contexto del Año Santo Jubilar 2025, la Palabra de Dios nos ofrece una ruta clara para vivir como discípulos valientes, alegres y pacíficos.

Hoy también recordamos a San Ceccardo de Luni, obispo mártir del siglo XIII, quien entregó su vida por la fidelidad a Cristo en medio de la injusticia. Su testimonio ilumina el mensaje de las lecturas que proclamamos en este día.

2. “No recibamos en vano la gracia de Dios” (2 Cor 6,1-10): ser cooperadores en la historia de la salvación

San Pablo, en su segunda carta a los Corintios, nos exhorta con vehemencia a no dejar pasar la gracia de Dios como si fuera algo superficial. “Ahora es el tiempo favorable”, dice el apóstol. Es decir, cada instante de nuestra existencia, por más difícil que sea, puede ser un kairós, un momento sagrado donde Dios actúa.

Pablo describe con intensidad su vida como apóstol: tribulaciones, golpes, cárceles, trabajos, vigilias, ayunos… y a pesar de todo eso, se mantiene con pureza, conocimiento, paciencia, bondad y amor sincero. Nos enseña que la misión cristiana no es escapar del mundo, sino vivirlo desde la fuerza del Evangelio, con el corazón fijo en Cristo y los pies firmes en la realidad.

En este Año Jubilar, marcado por el lema “Peregrinos de la esperanza”, estamos llamados a redescubrir nuestra vocación como cooperadores de la gracia, testigos del amor de Dios incluso en medio de las dificultades. No podemos ser cristianos de fachada: hoy es el día de dar testimonio auténtico, con valentía, sin miedo, con alegría.

3. “Aclamemos con júbilo al Señor” (Sal 97): la alabanza como actitud transformadora

El Salmo responsorial de hoy es un canto triunfante: “El Señor ha mostrado su victoria... ha hecho ver su justicia a las naciones.” Este canto nos recuerda que la fe no es solo lucha, sino también gozo, gratitud y confianza.

Incluso cuando enfrentamos pruebas, como San Pablo o San Ceccardo, el corazón del creyente canta, no porque niegue el dolor, sino porque cree que la victoria final pertenece a Dios. La alabanza es una forma de resistencia ante el mal: nos enseña a mirar más allá del conflicto inmediato y a confiar en la fidelidad divina.

4. “No hagan frente al que les hace daño” (Mt 5,38-42): la revolución del amor

El Evangelio según San Mateo nos presenta una de las enseñanzas más desafiantes y radicales de Jesús: la no violencia activa. “Han oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo les digo: no resistan al que les hace daño.” Esta no es una invitación a la pasividad ni a la resignación, sino a romper el ciclo del odio y la venganza con gestos concretos de amor.

Dar la otra mejilla, entregar el manto, andar dos millas… son expresiones proféticas que desarman al agresor y muestran la fuerza superior del amor. Esta actitud no es debilidad: es la potencia del Reino de Dios que vence al mal con el bien (cf. Rm 12,21).

En un mundo marcado por la polarización, el resentimiento y la violencia estructural, los cristianos estamos llamados a ser artesanos de paz, no solo con palabras, sino con gestos concretos. Esta es una misión urgente para la Iglesia hoy. ¿Cómo podemos hablar de misericordia si respondemos con dureza a quienes nos hieren?

5. Claves jubilares para vivir este Evangelio

En este Año Santo Jubilar 2025, el Papa León XIV nos ha invitado a abrir de par en par las puertas del corazón a la esperanza. A partir de las lecturas de hoy, propongo tres acciones jubilares para esta semana:

• Reavivar la misión personal: No pospongas más tu conversión ni tu entrega a Dios. Hoy es el día. ¿Qué estás esperando?
• Vivir la alegría del Evangelio: Aunque atravieses pruebas, el Señor camina contigo. Canta, alaba, bendice. El júbilo cristiano es profético.
• Responder al mal con el bien: Haz un gesto concreto de no violencia esta semana: pide perdón, busca reconciliación, evita una crítica, ayuda a quien te cuesta amar.

6. Vivir el ordinario con fe extraordinaria

La Palabra de Dios de este lunes 16 de junio es un llamado a la coherencia, la alegría y la firmeza del corazón. Vivimos tiempos exigentes, pero también llenos de oportunidades para hacer visible el Reino de Dios. En lo cotidiano, en lo sencillo, se juega nuestra fidelidad.

Pidamos la intercesión de San Ceccardo, mártir de la caridad pastoral, y su valentía para amar sin miedo. Y dejémonos conducir por el Espíritu Santo que, como nos enseñó Jesús, nos capacita para amar hasta el extremo, incluso a los enemigos.

Una frase para meditar esta semana:

“El amor no es vencido por el mal; es el amor quien vence al mal” (San Juan Pablo II).

Oración:

Señor Jesús, enséñanos a responder al mal con el bien, a vivir con alegría incluso en la prueba, y a no recibir en vano tu gracia. Que en este Año Santo Jubilar, nuestro corazón sea tierra fecunda donde crezca tu Reino de amor y de paz. Amén.

Parroquia de Santa Ana y San Joaquín – Ciudad de Panamá
Vive este Tiempo Ordinario con una fe extraordinaria. ¡Cristo vive y camina contigo!